Un implante dental actúa como un sustituto de la raíz del diente y es la mejor solución para tratar la ausencia de las piezas dentales. Mediante una sencilla intervención con anestesia local, los implantes de titanio se alojan en el hueso maxilar o mandibular y tras un tiempo de espera de entre 3 y 6 meses se coloca la prótesis o dientes definitivos.

 

Ventajas:

  1. Solución permanente: Con los cuidados adecuados, los implantes dentales son predecibles y exitosos a largo.
  2. Intervención indolora: gracias a la anestesia o la sedación el paciente no percibe ninguna sensación de disconfort.
  3. Mejora la calidad de vida: Devuelven la función masticatoria, fonética y estética al paciente interviniendo positivamente en la autoestima del paciente.
  4. Evitan el deterioro de los dientes contiguos: El implante dental frena la pérdida progresiva de hueso y, al poder masticar correcta- mente, no se deterioran otros dientes por carga de trabajo excesiva.
  5. Sonríe desde el primer día: El paciente puede disponer de la técnica de carga inmediata, es decir, dientes provisionales fijos desde el primer día de la cirugía.

 

 

Los implantes de carga inmediata son aquellos en los que se coloca el implante dental (tornillo que sustituye la raíz del diente) y una prótesis provisional fija en una sola intervención. Esta técnica favorece la cicatrización al guiar a los tejidos y permite prescindir del período sin dientes fijos, con las consiguientes ventajas estéticas y funcionales que eso conlleva para el paciente, que ya no tiene que verse obligado a llevar una prótesis removible o nada durante ese periodo de tiempo.

De esta forma, los implantes dentales inmediatos son la solución idónea para aquellos que quieran recuperar su sonrisa de forma rápida y eficaz y en Clínica Dental Riglos y Navarro la ponemos a su alcance, siempre pensando en la comodidad y el bienestar de nuestros pacientes.

 

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